Las obras de emergencia en la carretera SA-203, en la provincia de Salamanca, están en pleno desarrollo con una inversión que supera los 1,5 millones de euros. Estas actuaciones tienen como objetivo principal mejorar la seguridad en la calzada de uno de los itinerarios turísticos más importantes del sur de la provincia.
La zona en la que se está trabajando es conocida por su orografía accidentada, con constantes movimientos de derrubios provocados por factores climatológicos adversos como nevadas, heladas, viento y erosión. Esto ha generado que los muros de contención estén colmatados de desprendimientos y nuevas zonas de riesgo.
Las medidas de emergencia incluyen el recrecido de muros de mampostería, la ejecución de nuevos muros, la estabilización de la plataforma con pantallas de micropilotes, el hormigonado de bermas, la recolocación de barreras de seguridad y el repintado de marcas viales. Todo esto se llevará a cabo en una vía de aproximadamente 15 kilómetros de longitud, entre los puntos kilométricos 7+000 y 11+350.
La carretera SA-203 cuenta con una anchura de 6 metros, dos carriles de 3 metros sin arcenes y bermas de anchura variable. Su trazado discurre a media ladera, atravesando canchales y flujos de derrubios. La importancia turística de esta vía, que salva 700 metros de desnivel, ha motivado la necesidad de seguir mejorando su seguridad.
Además de estas obras, en Salamanca se están realizando otras inversiones significativas en modernización, conservación y actuaciones de emergencia. Destacan los trabajos de refuerzo del firme de la SA-104 en Guijuelo, las actuaciones de humanización de travesías y la mejora de la intersección de la carretera SA-100 en La Hoya.
Para el presente año, se prevé una inversión de 6,3 millones de euros en Salamanca, con proyectos como la mejora de la plataforma y firme de la SA-213 entre Tamames y la A-62 por Bocacara, con un importe de 5,7 millones de euros. Todas estas actuaciones buscan garantizar la seguridad vial y mejorar la infraestructura de la provincia.
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