El Tribunal Nacional continuó el martes el proceso promovido contra un guía turístico sevillano, acusado por tres presuntas agresiones sexuales a estudiantes estadounidenses en viajes a Marruecos y Portugal, ratificando al primer demandante del caso que el acusado «violó» y que tiene una lista de «40» jóvenes estadounidenses que habrían sufrido agresiones sexuales similares debido al caso.
La primera presunta víctima del acusado, Manuel Gerardo BV, responsable de la compañía «Discover Hie», cuya oficina registrada coincide con la de la compañía comercial «Voodoo Travel», de la que fue administrador y socio único; Apareció ante el tribunal para corroborar su acusación contra el acusado.
Este primer demandante dijo que, como estudiante estadounidense en Salamanca, viajó a Marruecos en un viaje promovido por la compañía del acusado, Discover Excure; Y la última noche antes de regresar a España, el 2 de noviembre de 2013, en un hotel en Tánger, el acusado estaba cerca de ella y dos de sus amigos, con quienes compartía una habitación, cuando estaban en la terraza del hotel tomando una cerveza.
Según su historia, el acusado, como «guía principal» del viaje, «parecía muy amable y amigable» y ella no sentía «incomodidad» ante él, explicando que más tarde sugirió tomar champán en la habitación, que estaban de acuerdo, dirigiéndose a él juntos en la Cámara Estudiantil, donde Manuel Gerardo ordenó champán al servicio de las habitaciones, recolectando alcohol «en la espalda» y sirviéndoles.
Puso «en lencería, casi desnuda»
Este primer demandante explicó que, en un momento, se sentía «extremadamente cansado», al darse cuenta de que Manuel Gerardo se desnudaba la ropa, estaba «en lino, casi desnudo»; Después de eso se durmió, no pudo especificar, despertando en la habitación con un «peso terrible, asombrado y confundido».
Mientras tuvo que ir al baño, según su testimonio, fue criado, pero tuvo problemas para mantener la verticalidad, «lentamente» hasta la limpieza, apoyando en la pared. Cuando abrió la puerta del baño, como dijo, se despertó para «sorpresa» de que sus amigos estaban en la bañera con el acusado, «en ropa interior», luego cerró la puerta, según su historia.
Más tarde fue, como recordó, cuando Manuel Gerardo y sus amigos dejaron la limpieza y luego entraron, pero sin cerrar el pestillo. Luego, según su historia, el acusado entró «repentinamente» en el baño y aprovechó el hecho de que estaba sentado en el inodoro frente a la puerta, «lo obligó» y lo obligó a practicar un corte; después de lo cual ella la habría empujado motivando su «parte» y perdió conocimiento.
«Un dolor muy fuerte»
Ya más tarde, según su historia, se despertó en la cama adicional de la habitación «vestida con pijamas» sin saber «cómo» llegó allí, pero sintiendo «un dolor muy fuerte» en sus órganos genitales, «aguijones» en el ano y «moratones en ambas rodillas»; Además, descubriendo que las sábanas eran «silla cubierta».
Según su historia, era «Plenamente consciente del dolor y el terror» que sintió, así como «humillación», aunque no podía «poner palabras» en la situación hasta que comenzó a participar en la terapia ya más tarde. «Estaba completamente horrorizado y muerto por lo que me pasó», dijo, y dijo que cuando comenzó a comunicar que estaba «drogado y violado».
Además, contó cómo, a través de diferentes esfuerzos, sabía que otro joven estudiante estadounidense sufrió una situación similar por parte del acusado, pero podría «navegar», asegurándose de que a lo largo de estos años, durante estos años, el resultado de su El trabajo, recopiló «mucha información», formó una lista de «40 niñas que dieron una declaración en los Estados Unidos» sobre las agresiones cometidas por Manuel Gerardo «de 2009 a 2019».
Compañero de cuarto
Uno de los amigos que compartió una habitación con ella en la noche de los eventos confesó de su lado que esta primera víctima del caso «dijo que estaba interesado» por Manuel Gerardo y que los «molestó» por esta razón, diciendo que él Fue recordando que había juegos sexuales en la habitación, aunque sin recordar qué acusado y la víctima estaban en el baño, aunque sin recordar si habían accedido juntos.
El otro compañero de cuarto recordó, con accidente cerebrovascular, que, en realidad, Manuel Gerardo «tenía una actitud de coquetear con los tres» estudiantes «, que el solicitante y él estaban en el baño, entrando en lo mismo» durante el cual pensó que dijo, como, como ellos han dicho; Y cuando se despertó «había heces en todas partes» en la habitación, sin poder recordar «nada más», dijo.